Entra una viejita de ochenta y tantos años a una farmacia temblando toda. Se acerca al farmacéutico, no paraba de temblar la pobre, y le dice:
- Señor, ¿ustedes venden vibradores?
- Si señora, quiere comprar uno?
- No, sólo quiero saber cómo se apaga.
- Señor, ¿ustedes venden vibradores?
- Si señora, quiere comprar uno?
- No, sólo quiero saber cómo se apaga.
0 comentarios:
Publicar un comentario